La apicectomía es una técnica quirúrgica que busca controlar y eliminar una infección bucodental. Os contamos qué es, cuándo y cómo se realiza y qué debemos tener en cuenta a la hora de someternos a este tratamiento.

La apicectomía es un procedimiento quirúrgico que se realiza en odontología para tratar una infección o inflamación en la punta de la raíz de un diente. Esta técnica se utiliza cuando la infección persiste después de un tratamiento de conducto radicular (endodoncia) o cuando no es posible acceder al extremo de la raíz a través del tratamiento de conducto. Con esta técnica se anula la raíz del diente dañado limpiando los tejidos gingivales adyacentes que tengan infección.

Forma parte de los tratamientos aplicados en odontología conservadora, es decir, aquellos que tienen como principal objetivo salvar el diente.

Ambos son tratamientos utilizados en odontología para tratar problemas en el interior de un diente pero difieren en varios aspectos, incluyendo el enfoque del tratamiento y el objetivo final:

Endodoncia (tratamiento de conducto radicular):

• La endodoncia, también conocida como tratamiento de conducto radicular, se realiza para tratar el interior del diente cuando la pulpa dental (tejido blando en el centro del diente que contiene nervios, vasos sanguíneos y tejido conectivo) está infectada o dañada.
• Durante una endodoncia, se elimina la pulpa dañada o infectada, se limpian y desinfectan los conductos radiculares del diente, y luego se sellan con un material de relleno.
• El objetivo principal de la endodoncia es salvar el diente, eliminar la fuente de la infección y aliviar el dolor asociado.

Apicectomía:

• La apicectomía es un procedimiento quirúrgico que se realiza cuando una endodoncia convencional no es suficiente para tratar una infección persistente en la punta de la raíz del diente.
• Durante una apicectomía, se accede a la raíz del diente a través de una incisión en la encía, y se elimina la punta de la raíz (ápice) junto con cualquier tejido infectado o inflamado.
• Después de la eliminación del ápice, se sella la punta de la raíz para prevenir la recurrencia de la infección y se sutura la encía.
• La apicectomía se utiliza cuando una infección persiste después de una endodoncia o cuando no es posible acceder al extremo de la raíz mediante el tratamiento de conducto convencional.

Podriamos resumir diciendo que la endodoncia se centra en el tratamiento del interior del diente (la pulpa), mientras que la apicectomía se enfoca en abordar problemas específicos en la punta de la raíz del diente cuando una endodoncia convencional no es suficiente.

Comenzar diciendo que no es un procedimiento muy doloroso ya que se trata de una cirugía poco invasiva. Se realiza, generalmente, bajo anestesia local para minimizar las molestias durante la cirugía. Y la duración de la intervención suele oscilar entre 60 y 90 minutos.

Comenzamos realizando una incisión en la encía para exponer la raíz del diente infectado. Luego, se elimina la punta de la raíz, conocida como ápice, junto con cualquier tejido infectado o inflamado. Después de esto, se sella la punta de la raíz con un material especial para prevenir futuras infecciones. Y, finalmente, se sutura la zona de la encía en la que se ha hecho la incisión y se deja que el área sane.

Dos semanas después de la operación, las suturas serán imperceptibles y la zona comenzará a regenerarse. Pasados seis meses, los tejidos ya estarán totalmente recuperados.

La apicectomía está indicada en aquellos cuadros clínicos que no pueden ser tratados de manera efectiva mediante un tratamiento de conducto radicular convencional. Por ejemplo:

• Infección persistente: Cuando una infección en la raíz de la pieza dental no responde al tratamiento del conducto radicular o cuando la anatomía de la raíz dificulta el acceso completo para eliminar el tejido infectado.
• Reaparición de infección después de un tratamiento de conducto: A veces, una infección puede reaparecer después de un tratamiento de conducto radicular debido a la presencia de conductos radiculares accesorios o la persistencia de bacterias en el extremo de la raíz.
• Daño en la raíz: Cuando hay un daño en la raíz del diente, como fracturas o curvaturas anómalas, que impiden el tratamiento de conducto convencional.
• Cuerpos extraños en la raíz: En casos raros, puede haber objetos extraños en el interior de la raíz del diente que no pueden ser eliminados con el tratamiento de conducto.

La apicectomía es, generalmente, un tratamiento seguro y efectivo para abordar problemas específicos en la punta de la raíz del diente. Sin embargo, hay algunas situaciones en las que puede estar contraindicada o puede no ser la opción de tratamiento más adecuada. Por ejemplo:

• Daño extenso en la estructura del diente: Cuando el diente está gravemente dañado debido a caries profundas, fracturas extensas u otros problemas estructurales. En esos casos, puede ser más apropiado extraer el diente en lugar de realizar una apicectomía.
• Pronóstico pobre para la salud bucal a largo plazo: Si el diente afectado tiene un pronóstico pobre para la salud bucal a largo plazo, como en casos de enfermedad periodontal avanzada o pérdida ósea significativa alrededor del diente, la apicectomía puede no ser una opción viable.
• Infecciones sistémicas no controladas: En casos de infecciones sistémicas graves o enfermedades sistémicas no controladas que puedan aumentar el riesgo de complicaciones durante la cirugía o interferir con el proceso de cicatrización, la apicectomía puede estar contraindicada hasta que la condición sistémica esté bajo control.
• Anatomía inadecuada de la raíz: Cuando la anatomía de la raíz del diente no permite un acceso adecuado para realizar una apicectomía de manera efectiva, o si hay estructuras anatómicas cercanas que puedan ser comprometidas durante la cirugía.
• Pronóstico insatisfactorio para el éxito del tratamiento: Cuando el odontólogo determine que las posibilidades de éxito del tratamiento son muy bajas debido a la extensión de la infección o a otros factores.

Es importante analizar con tu odontólogo todas las opciones de tratamiento disponibles y considerar los riesgos y beneficios específicos en tu caso particular antes de tomar una decisión sobre si realizar una apicectomía o no.

Como comentábamos anteriormente, la apicectomía es una intervención sencilla pero muy especializada. Por ello, es fundamental optar por una clínica dental que cuente con profesionales capacitados y con equipamientos avanzados. Si necesitas más información pide tu cita con nosotros». Nuestra clínica dental está en Vallecas Villa.